El Método para mejorar el controll del asma de “Escuela de asma” se desarrolla en 5 etapas con una duración habitual inferior a 12 semanas. Las 5 etapas son:

  1. Alcanzar el control de los síntomas del asma (dificultad respiratoria, tos, ruidos, tiraje, etc.)
  2. Mantener la función pulmonar en valores de normalidad
  3. Prevenir las crisis o empeoramientos
  4. Permanecer en el nivel de buen control de los síntomas
  5. Realizar vida normal con asma

En todas las etapas se utilizan herramientas de la psicología de la salud, del coaching, counseling y entrevista motivacional como autorregistros, toma compartida de decisiones, determinación de objetivos terapéuticos, elaboración consensuada de planes personalizados de tratamiento, entre otras técnicas.

Por ejemplo, los planes personalizados de tratamiento, son herramientas esenciales tanto para prevenir las crisis como para controlar el asma. Para ello es imprescindible que el paciente o su familia estén bien informados y entrenados en las habilidades necesarias para el manejo del asma.

Quizá estás etapas parezcan inalcanzables, sobre todo para quienes hayan estado peor controlados. La experiencia me ha demostrado durante muchos años, que pueden alcanzarse en la inmensa mayoría de los niños y adultos, eso sí, con las estrategias adecuadas. Es fundamental una colaboración efectiva entre los profesionales de la salud y los pacientes o cuidadores del niño, que favorezca la autonomía y la menor dependencia con respecto a la asistencia sanitaria.

El objetivo de Escuela de Asma es enseñar a prevenir y controlar el asma, para que sean los pacientes quienes aprendan a autogestionar la enfermedad. Es algo parecido a lo que se hace en otras enfermedades crónicas, como la diabetes, que tiene resultados tan satisfactorios.

Los profesionales de la salud debemos proporcionar abundante información sobre la enfermedad y sus tratamientos, entrenar en habilidades de autocuidados del asma, resolver sin prisa las dudas que planteéis los pacientes y realizar un seguimiento adecuado a la gravedad del asma del niño para mantener su enfermedad bajo control a corto, medio y largo plazo.

La mayoría de niños y adultos con asma no están bien controlados

La gran frecuencia del asma, especialmente en la infancia, hace que debiera ser considerado como un problema de salud pública. Las crisis de asma son la tercera causa de hospitalizaciones pediátricas y una de las causas más habituales de visita a urgencias en la edad infantil. Muchos de esos ingresos y asistencias a urgencias podrían evitarse con una adecuada información y programas de educación sanitaria en asma.

En los últimos años, el asma infantil mal controlado se ha convertido en un importante problema para los sistemas sanitarios, no solo desde el punto de vista de la salud, sino también desde una perspectiva económica, por el notable incremento del gasto que ocasiona, además del impacto en la calidad de vida.

A pesar de los recientes avances en el tratamiento del asma y de los esfuerzos en la elaboración de Guías Clínicas (GEMA y GINA), se da la paradoja de que el control de la mayoría de los niños continúa siendo subóptimo. Diversos estudios han objetivado que se puede conseguir un buen control de la enfermedad en la mayoría de los pacientes, aunque esta condición no se suele dar en la práctica diaria.

Resultados del programa

Los resultados observados con el programa Escuela de Asma son:

  • Disminución de síntomas como tos, dificultad respiratoria, tiraje, ruidos torácicos, etc.
  • Reducción de visitas a urgencias y hospitalizaciones.
  • Minimización de la necesidad de altas dosis de broncodilatadores de rescate (salbutamol) y de corticoides sistémicos (estilsona).
  • Evitación de ausencias escolares o laborales.

Los medicamentos son necesarios, pero no son el único componente para afrontar el asma, y esta es la diferencia que aporta este Método Participativo. La educación sanitaria en autocuidados, junto al control ambiental y el seguimiento estrecho, son esenciales en este camino.

Eficacia de los autocuidados en asma

Mi trabajo me demuestra cada día que el autocuidado es la estrategia más eficaz para mejorar el control de los niños y adultos que tienen asma. Pero os advierto que esta meta no puede alcanzarse si el niño o sus familiares no comprenden bien la enfermedad, sus tratamientos, o sencillamente no están implicados activamente en el manejo de la enfermedad del niño.

Y es que en el manejo de las enfermedades crónicas es fundamental compartir la responsabilidad de las decisiones entre profesionales de la salud y pacientes (en el caso de los niños, sus madres y sus padres). Esto requiere la colaboración activa entre las personas que cuidan al niño y los profesionales sanitarios que lo atienden.

Coaching para el asma

En el Coaching los planes de acción se dirigen a lograr objetivos. Pues bien, el objetivo en el caso de estos niños, es que tanto madres como padres, aprendan a tener el asma bajo control y que lo mantengan de forma prolongada, previniendo de esta manera la aparición de crisis de asma.

Con esta finalidad se elaboran de forma consensuada Planes personalizados de tratamiento, tanto para prevenir las crisis como para controlar el asma. Para ello es imprescindible que la familia esté bien informada y entrenada en las habilidades necesarias para el manejo del asma de sus hijos.

Es esencial que comprendáis que el Método Participativo de Escuela de Asma pretende complementar la atención médica; en ningún caso sustituirla. Por lo tanto, aunque participéis en esta escuela, no dudéis en preguntar a vuestro médico las cosas que necesitéis u os preocupen sobre la enfermedad o los tratamientos de vuestros hijos. Sí, vuestra actitud es esencial.

Lo que ha de quedaros muy claro es que, con la experiencia de haber tratado miles de niñas, niños, jóvenes y adultos con asma, he comprobado que la mejor manera de tener la enfermedad bajo control es que madres y padres aprendáis a detectar las crisis lo antes posible y sepáis, con seguridad, qué tratamientos usar, según los planes de acción personalizados, para controlar la inflamación bronquial y así evitar la crisis.

El método participativo de la Escuela de asma ha sido desarrollado por del Dr. Javier Contreras.